Atenta a la demanda y para contar con un buen stock de unidades en los concesionarios europeos, la compañía inició rápidamente la producción del SUV coupé y de su variante eléctrica en el complejo industrial de Regensburg, uno de los más avanzados del grupo, que se destaca por contar con el uso extendido de inteligencia artificial en todo el proceso de fabricación.
La firma de Munich presentó la segunda generación de su SUV, que adoptó un estilo similar al X4 o X6 y sumó una variante 100% eléctrica. Se destaca también por su evolución tecnológica. Inicialmente, la gama estará compuesta por versiones nafteras (mild-hybrid) y diésel de 170 y 150 CV, más el iX2 de 313 CV y 449 kilómetros de autonomía.
Medios de prensa europeos fotografiaron a una unidad de pruebas que bajo la carrocería de un BMW X2 xDrive25e –la versión híbrida del SUV- esconde el sistema de propulsión eléctrico de esta nueva variante que recién sería presentada en 2021 y podría ofrecer una autonomía superior a los 300 km.
