El Renault Kwid E-Tech tiene varias identidades a nivel global. Aquí lo conocemos con el emblema del rombo, mientras que en China también existe un “clon” de Dongfeng y en Europa, el más sofisticado Dacia Spring, que a principios de este año recibió una profunda actualización, modificando considerablemente su diseño e incorporando más equipamiento, especialmente en seguridad. Al igual que sucedió con la Duster, esta renovación también llegará más temprano que tarde al Kwid y la marca francesa ya lo está probando en Brasil.
Así lo demuestran las imágenes y el video publicado en el instagram de @autoinbrasil en los que se ve a una unidad de pruebas –sólo con los emblemas tapados- circulando por las calles de Curitiba, cerca del Complejo Industrial Ayrton Senna, donde Renault fabrica las versiones con motor de combustión.
Aunque el Kwid E-Tech recién fue presentado este año en Argentina, al haberse renovado su primo/hermano de Dacia es lógico que esta actualización también sea introducida en el modelo de Renault, más aún teniendo en cuenta que ambos son producidos en China, desde donde arriban a sus respectivos mercados.
Con un importante rediseño del sector frontal, el renovado Spring ahora se acerca más al nuevo estilo de Dacia implantado en la nueva Duster. Si bien mantiene los faros divididos en dos, las ópticas superiores ganaron en tamaño y ahora poseen una firma luminosa en forma de Y, mientras que la parrilla es más horizontal e incorporó el nuevo emblema de la compañía. Por debajo, el paragolpes recibió trazos más rectos, con faros de formato más trapezoidal al igual que la toma de aire –parcialmente carenada-. Sí mantiene las protecciones en plástico negro en el sector inferior y en los pasarruedas.
De perfil conserva la típica silueta del Kwid, con nuevo diseño para las llantas de aleación/tazas y un aplique en negro sobre el pilar C. Por último, en la parte trasera los faros se renovaron por completo, también con una firma luminosa en forma de Y junto con un aplique que se extiende sobre el portón uniéndolos entre sí. El paragolpes suma una prominente protección en plástico negro.
Puertas adentro, el restyling es completo: se renovó toda la plancha frontal, que ahora luce mucho más moderna y tecnológica al sumar un nuevo instrumental 100% digital más grande que el anterior y una enorme pantalla de 10 pulgadas para el sistema multimedia, compatible con Android Auto y Apple CarPlay. Las versiones más accesibles cuentan con un soporte para smartphone en ese lugar para utilizar la pantalla del teléfono como multimedia. Por debajo se reubicaron las salidas de aire y estrena nuevos mandos para el aire acondicionado, de mejor calidad y apariencia que los anteriores. Aunque todo el interior está construido con plásticos duros, el rediseño y el agregado de apliques en diferentes tonos, realza su apariencia. También estrena un nuevo selector de marchas. Por último, gracias a algunas mejoras en el aprovechamiento del espacio, se logró incrementar la capacidad del baúl a 308 litros.
Mención aparte para las mejoras en tecnología y seguridad, ya que además de los 6 airbags y los controles de tracción y estabilidad, el Spring suma algunos sistemas de asistencia a la conducción obligatorios en Europa, como el frenado autónomo de emergencia con detección de peatones y ciclistas, reconocimiento de señales de tránsito con alerta de exceso de velocidad, asistente al estacionamiento, alerta de cambio involuntario de carril, detector de fatiga y asistente de mantenimiento de carril.
Mecánicamente, el citycar está disponible en Europa con dos motorizaciones eléctricas, una de 45 CV y 125 Nm de torque para la versión de acceso y otra de 65 CV y 113 Nm de par, ambas alimentadas por un paquete de baterías de 27 kWh de capacidad, que le proporcionan una autonomía de alrededor de 220 kilómetros. La novedad es que ahora admite carga bidireccional, por lo que además de recargar su batería, puede ser utilizado como generador.
Estimamos que el restyling del Kwid E-Tech será presentado y lanzado a principios del año que viene.