La electrificación es el futuro de la industria del automóvil, pero a pesar de que extrañaremos el sonido de los motores de combustión, los eléctricos también intentarán transmitirnos emociones, no sólo al conducirlos, sino también al verlos. Que representen el futuro, no significa que dejen atrás el pasado, sino todo lo contrario: pueden reinterpretarlo. Eso es lo que pretende Renault al revivir al mítico R5. Moderno, tecnológico, accesible… pero con un diseño que sin dudas es el mejor homenaje al pequeño hatchback que motorizó a una generación en Europa.
Si el R5 original fue uno de los pioneros en incorporar un motor turbo –acaso su versión más célebre y recordada- el nuevo modelo quiere ser pionero en electrificación masiva, popularizar este sistema de propulsión de la misma manera que su antecesor que se convirtió en uno de los autos más vendidos de la marca. Por ahora presentado como concept, fue la gran sorpresa que tenía reservada Luca di Meo, CEO de Renault, para este jueves cuando dio a conocer la nueva estrategia de la compañía, denominada “Renaulution” en un juego de palabras entre el nombre de la empresa y “evolución”. El futuro de la firma del rombo será completamente electrificado, dejará atrás al diésel –reservado sólo para vehículos comerciales- y este simpático prototipo es solo una muestra de ello.
El diseño del Renault 5 de la década del 70, e incluso el de la versión Turbo que participaba en el campeonato mundial de rally, fue perfectamente reinterpretado, manteniendo sus proporciones y principales rasgos que lo identificaban, pero llevados al siglo XXI: todo está en su lugar, desde la forma de los faros o hasta el logo de la marca, es similar al original. Claro que con un toque de sofisticación y modernismo, con tecnología de Led y superficies limpias, casi minimalistas. Hasta las luces antiniebla son un guiño a la versión deportiva y como señalamos anteriormente, el logo se asemeja al que la compañía utilizaba en aquellos años aunque levemente modificado… ¿Anticipa el rediseño del emblema de Renault? Es una posibilidad.
Volviendo al concept, además de su logradísimo diseño en el que van apareciendo más y más detalles a medida en que lo observamos detenidamente, como el número 5 presente en los faros, logos y hasta en el centro de las llantas, está desarrollado sobre la plataforma CMF-EV del Grupo Renault-Nissan-Mitsubishi, destinada para vehículos 100% eléctricos. Si bien no se informaron sus dimensiones, por su apariencia se ubicaría en el segmento B y podría ser el reemplazante del Twingo, que en su actual generación también rinde homenaje al R5.
La firma gala no brindó muchas precisiones sobre el prototipo, pero sí aclaró que tendrá un posicionamiento accesible y no buscará convertirse en un modelo más Premium como el MINI Cooper. Tendrá un perfil marcadamente citadino y se convertirá en un duro rival para el Honda e –otro con estética retro-futurista- y el Fiat 500. Mecánicamente, su potencia y prestaciones son una incógnita, aunque se habla que compartirá el paquete de baterías de 50 kWh de capacidad del Zoe, por lo que su autonomía rondaría los 350 kilómetros.
Su pase a producción está confirmado y no se hará esperar mucho tiempo más: se espera que la versión definitiva –que no tendrá modificaciones muy importantes respecto al concept- sea presentada en 2022.