Fue el puntapié inicial para la ambiciosa estrategia de electrificación de BMW, su diseño rupturista, concepto moderno y la utilización de materiales compuestos y reciclables para su construcción lo convirtieron en referente entre los autos eléctricos y se convirtió rápidamente en un éxito. Su demanda llevó a que la firma de Munich decidiera mantenerlo en producción más tiempo que su hermano mayor, el i8, pero también pronto le va a llegar su final, incluso antes de lo previsto.
Con más de 250.000 unidades salidas de la planta de Leipzig, el i3 no puede recibir otro calificativo que no sea éxito, más aún considerando su costo de producción y tratándose de un auto eléctrico surgido cuando las marcas recién empezaban a interiorizarse en el tema, pero BMW ya está atravesando una segunda etapa en su estrategia, con muchos más productos en su gama y la inminente presentación del nuevo i3, que nada tiene que ver con el monovolumen.
Como ya se sabe, la firma de Munich planea lanzar una versión eléctrica de cada uno de sus productos de su gama, que recibirán la denominación i o iX –si se trata de un SUV- y el i3 es justamente la variante 100% eléctrica del Serie 3, por lo que el monovolumen deberá decir adiós. A pesar de su trascendencia, tampoco tendrá un sucesor directo. La marca no tiene pensado crear otro vehículo bajo su mismo formato, por lo que su lugar será ocupado por el futuro iX1 –basado en el X1- y en el próximo MINI Cooper SE.
Según varios medios de prensa europeos, la decisión ya habría sido tomada por los directivos de BMW y la última unidad sería producida en junio de este año en lugar de 2023 o 2024 como estaba previsto inicialmente. Este cambio en los planes se debe, como señalamos antes, a diversos factores, por un lado, el próximo lanzamiento del i3, pero también a su elevado costo de producción debido a los materiales que utiliza. Por último, al ser un vehículo con unos cuantos años en el mercado –fue presentado en 2013- ya empezaba a evidenciar algunas limitaciones, especialmente en cuanto a autonomía.
Vale recordar que mecánicamente, el i3 está impulsado por un motor eléctrico de 170 CV que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en solo 7,3 segundos. Cuenta con un paquete de baterías de iones de litio de 33 kWh de capacidad que le permite lograr una autonomía de hasta 310 kilómetros o la opción de incorporar un extensor de autonomía –un pequeño motor naftero de 2 cilindros y 650 cc- que funciona como generador.
Sin dudas, a pesar de no haber llegado hasta 2024, el i3 consiguió sobrevivir mucho más de la cuenta y será recordado como un producto clave para la marca, ganándose un gran lugar en su historia.
