¿Entra un SUV y sale un hatchback? Esta jugada que está siendo bastante habitual en muchas marcas por la demanda que están teniendo los Sport Utility Vehicles que vienen desplazando de las preferencias del público a los formatos más tradicionales, también podría ser la que Nissan aplique en nuestra región. Al menos así lo anticipan algunos medios de prensa del país vecino como Motor1 basados en una entrevista reciente con Marco Silva, Presidente de Nissan do Brasil y en trascendidos de fuentes cercanas a la firma japonesa.
De acuerdo a estos rumores, la marca lanzaría en 2022 al Magnite, el hermano menor del Kicks cuya versión definitiva será presentada próximamente en India, para que ocupe el lugar del March, que dejaría de fabricarse en septiembre de este mismo año en la planta de Resende, que sí continuará con la producción del V-Drive –el Versa de anterior generación que complementará al nuevo- y del Kicks, que como ya se sabe, el año que viene recibirá un profundo restyling y más adelante sumará una versión híbrida e-Power.
Desde la automotriz nipona no confirmaron ni negaron estos planes, pero analizando la nueva estrategia que implementará la alianza Nissan-Renault-Mitsubishi, la idea tiene sentido: el Magnite es un A-SUV que está basado en la plataforma CMF-A, es decir, la misma del Renault Kwid, por lo que podría fabricarse en el complejo industrial de Sao José dos Pinhais, que también podría sumar al Kiger, el Sport Utility derivado del citycar del rombo.
De esta manera, se cumpliría la estrategia “leader-follower” mediante la cual una compañía se especializa en el desarrollo de una plataforma y producto y las otras aprovechan sus componentes para crear sus propias versiones. Además, así el March tendría un sustituto, ya que no hay planes de importar o producir la variante europea del hatchback, por lo que su continuidad es una incógnita.
El Magnite apunta al lucrativo nicho de mercado que se generó en India donde los vehículos de hasta 4 metros de largo reciben beneficios impositivos. Conocido internamente como Proyecto TBC, promete destacarse por su diseño y tecnología. Mecánicamente, si bien aún la información no fue confirmada por la marca, se espera que comparta con el Triber y Kiger el ya conocido propulsor tricilíndrico 1.0 de 68 CV al que más tarde se le sumará una variante turboalimentada, con una potencia de alrededor de 100 CV, que estará disponible con una caja manual de 5 marchas o automatizada, también de 5 velocidades, siempre con tracción delantera.
¿Se confirmarán los rumores? Por el momento no hubo ratificación ni desmentida oficial, por lo que la posibilidad está. Sólo habrá que esperar.
