Después de algunos anticipos, finalmente llegó el día y el Virtus mostró su “nueva cara” en India, país en el que a la vez debuta como reemplazante del Polo Sedán que aún se fabricaba y comercializaba allí. Más allá de cambios estéticos, el tricuerpo llega con más tecnología y una nueva motorización, anticipando algunas de las modificaciones que debería incorporar el modelo regional.
A nivel de diseño, se destaca una clara inspiración en sus hermanos mayores Vento (Jetta) y Passat, diferenciándose del Polo hatchback. Esto se hace presente principalmente en el sector frontal, en el formato de los faros que cuentan con un marco cromado que se extiende hacia la parrilla y, en lugar de luces de Led con sistema tipo espejo como podemos encontrar en el Nivus o Taos, disponen de proyectores. El paragolpes también fue completamente rediseñado y agrega una suerte de máscara que se extiende a lo ancho, integrando las luces antiniebla y la gran toma de aire central. Cabe aclarar que las imágenes corresponden a la versión GT, con un look más deportivo, otorgado por los detalles en negro, en el paragolpes, techo, carcasa de los espejos, llantas y faros con máscara oscurecida.
De perfil es donde menos se perciben los cambios respecto al Virtus que ya conocemos, ya que solo recibió nuevas llantas de aleación. Tal como señalamos anteriormente, la versión GT tienen la particularidad de contar con llantas de color negro, carcasa de los espejos en color grafito y el techo negro. Por último, en la parte trasera se modificó el diseño interno de los faros, con óptica traslucida y agrega un símil difusor en la parte baja del paragolpes y un pequeño spoiler rematando la tapa del baúl.
Puertas adentro también hay algunas diferencias: si bien la plancha frontal luce similar al modelo producido en Brasil, la versión GT agrega un marco de color rojo. Por supuesto, cuenta con el instrumental 100% digital configurable por el conductor, un nuevo sistema multimedia similar al VW Play y estrena el nuevo volante utilizado por los últimos productos de la marca como el Nivus o Taos. Al igual que en el MY2022, recibió nuevos comandos para el climatizador, ahora del tipo táctiles en lugar de los mandos físicos tipo ruleta. También sumó cargador inalámbrico para smartphones. En cuanto a equipamiento, dispone de climatizador automático, techo solar eléctrico, sistema multimedia compatible con Android Auto y Apple CarPlay con conexión inalámbrica, equipo de sonido con 8 parlantes, seis airbags, control de tracción y control de estabilidad, entre otros ítems.
Mecánicamente, el Virtus indio toma distancia del brasileño: las versiones de entrada están impulsadas con un motor naftero 1.0 TSI de 115 CV, asociado a una caja manual o automática con convertidor de par, ambas de 6 velocidades, mientras que la variante GT utiliza el más moderno 1.5 TSI de 150 CV, acoplado a la caja automática DSG de doble embrague y 7 marchas.
Estos cambios podrían servir como base para la actualización de su par regional, que ya está siendo probado en el país vecino. Sin embargo, el sedán brasileño seguramente presentará algunas diferencias estéticas y mantendría las motorizaciones actuales, sólo podría reemplazar el 1.6 MSI por el 1.0 TSI, aunque aún no está confirmado. Las ventas en India comenzarán en mayo, mientras que la actualización del Virtus para América del Sur está prevista para fines de año o principios de 2023.
Realmente no veo cual es el cambio que lo hace menos insulso.
Y si bien podría tener un motor más potente (el GLS lo tiene), yo tengo un Confortline 2019 con 60.000 KLM y aseguró que se mueve muy bien, en ciudad y ruta. Es muy buen auto.
Sigue siendo un diseño muy insulso.. pero mejoró mucho comparado con el virtus que se vende aquí
espero que al menos saquen motorizaciones obsoletas como el 1.6 msi .