El Ka+ es ni más ni menos que la versión sedán de la última generación del modelo presentado en marzo de 2016 y que 16 válvulas ya probó para todos ustedes. Ya te dijimos que el modelo prácticamente solo conserva el nombre respecto a la generación anterior, porque cambió en todo. Siempre dentro de los lineamientos fijados por el Kinetic Design, la corriente de diseño que identifica a todos los modelos de la marca del óvalo.
En esta oportunidad probamos este Ka con cuatro puertas y baúl que para la marca estadounidense reúne las mismas virtudes que el hatchback: ingeniería de avanzada, tecnologías innovadoras, diseño atrayente y funcional, y equipamiento diferenciador.
Fue diseñado bajo la plataforma global del Fiesta Kinetic Design y llega proveniente de la planta de Camari, Brasil. Al igual que el cinco puertas, se comercializa en tres versiones de equipamiento: S, SE y SEL. Las tres con el mismo motor naftero 1.6 de 105 CV de potencia, con tracción delantera y caja manual de cinco velocidades.
Para determinar cuáles son los potenciales clientes de este vehículo podríamos imaginar a una pareja que recién se casa. Primero se siente cómoda y resuelve sus necesidades de movilidad con el Ka convencional. Hasta que el fruto del amor o el descuido, agranda la familia y los requerimientos son otros: mayor espacio interior, funcionalidad y un baúl de mayor capacidad. Es que ahora hay que guardar el carrito para el bebé, la cuna funcional y algunos juguetes. Ni hablar en caso de salir de vacaciones. Diríamos que el cambio de auto es un traspaso natural.
Es que en el Ka+ encuentran una interesante habitabilidad, excelente capacidad de carga, los últimos adelantos en términos de conectividad y un confort de marcha en ciudad que se combina con la austeridad en los consumos de combustible, lo que termina de cerrar una más que favorable ecuación precio-producto.
¿Con quiénes compite? Integra el segmento B sedán donde la marca Ford no tenía representantes. Ahora da pelea con argumentos sólido frente a rivales como Renault Logan, Toyota Etios, Fiat Siena, Volkswagen Polo, Chevrolet Prisma entre otros.
Las medidas del Ka+ se definieron con un largo de 4.254 mm, un ancho con espejos de 1.911 mm y un alto de 1.525 mm. A su vez, la distancia entre ejes es de 2.491 mm. La diferencia más importante que presentan las dos siluetas del nuevo Ka radican en sus dimensiones. La versión sedán mide 368 mm más de largo que el hatchback (4.254 mm vs. 3.886 dm3). Ambos presentan la misma distancia entre eje, que le proporciona espacios generosos para que cuatro adultos viajen cómodamente. Pero lo de mayor significado está en el baúl, pasó de los 257 litros a los 445 litros, cerca del doble.
El frente es el mismo, repitiendo la fórmula de éxito de toda la gama, que se inició con el Fiesta, con la destacada presencia de esa gran boca que simula su parrilla hexagonal como sello indiscutido del Kinetic Design, la corriente de diseño de Ford que tiene como objetivo mostrar movimiento aún cuando el vehículo está detenido. La acompañan el clásico óvalo sobre el frente y unos faros oblicuos alargados. A su vez, el capot presenta líneas de carácter que le otorgan gran personalidad.
Sobre los laterales, dos trazos bien marcados definen la silueta, uno a la altura de las manijas y el otro sobre la zona inferior de las puertas. Todo fluye de manera fluida hacia atrás.
Hasta el sector posterior todo es igual a la versión convencional. La incoporación del baúl no parece un injerto como muchos otros modelos que parten de una versión hatchback, está perfectamente acoplado al resto de la carrocería y le da un remate al auto de manera natural. El modelo muestra armonía para integrar los faros traseros, el paragolpes y la terminación del parabrisas.
Se comercializa en cuatro variantes de colores (Plata estelar, Negro Elony, Rojo Sport y Blanco Oxford) que acompañan el perfil joven, deportivo y moderno que los diseñadores de la marca del óvalo quieren transmitir con este auto.
Como ya dijimos el año pasado, cuando probamos al nuevo Ka, el nivel de los materiales y terminaciones supera la media de su segmento, dentro de un habitáculo que es sobrio y moderno al mismo tiempo. Los ingenieros de Ford priorizaron lo que ellos definen como espacio inteligente aprovechando al máximo cada centímetro para ofrecerle a los pasajeros la mayor comodidad posible.
Destacamos nuevamente el acceso al vehículo gracias a la amplitud de puertas que ofrece tanto adelante como atrás, en que le posibilita ubicar cómodamente a cuatro adultos y un menor. Hay buenos espacios para las piernas y colabora también la altura hacia el techo. La posición de manejo es aceptable, puede regularse la extensión y el respaldo de la butaca, pero no la altura. Este privilegio solo lo tienen quienes compran la versión tope de gama. Esto complica a los de mayor estatura que no podrá acomodarse ya que el asiento está ubicado en una posición fija.
Si bien no tiene regulación de la altura de la butaca, para un conductor de 1,75 m todavía quedan 15 cm de distancia al techo. En lo que respecta a su habitabilidad en las plazas traserasa, para un pasajero de 1,75 m de altura, la distancia de las rodillas a los respaldos de las plazas delanteras es de 13 cm, mientras la distancia al techo es de 5 cm.
Por otra parte, los comandos se ubicaron al alcance del conductor. El interior es práctico, espacioso y funcional. Así lo demuestran los 21 portaobjetos distribuidos en todo el habitáculo, como los portabotellas en la puertas delanteras o los posavasos.
Si en la versión hatchback decíamos que la capacidad del baúl está sdentro de lo justo, en este sedan sucede todo lo contrario, con sus 445 litros, 188 litros más que el cinco puertas. Con estos espacios no será necesario recurrir a un portaequipaje o enviar las valijas por un expreso cuando salimos de vacaciones. Afortunadamente, debajo del piso del baúl encontramos una rueda de auxilio de las mismas medidas que las cuatro rodantes.
Cuenta con el mismo tablero analógico de tres agujas que la silueta hatch, con una visualización fácil y rápida. Como hacemos normalmente contrastamos el velocímetro para medir su error porcentual, es así que circulando a 80 km/h el real era de 72; a 100 km/h era 92; cuando lo hacíamos a 120 el verdadero era 112, mientras a 130 km/h el correcto era de 122, arrojandoun error porcentual de 7,7%, un tanto alto.
El equipamiento de confort y seguridad:
En esta oportunidad probamos la versión S que proviene de fábrica con un equipamiento reducido que lo ubica en una posición desfavorable respecto a sus competidores. Quizá la marca del óvalo nos había acostumbrado mal. Solo basta con recordar el equipamiento del primer Fiesta KD cuando comenzó a dar sus primeros pasos.
Nos parece que podría haber incorporado más elementos de serie como, por ejemplo, los levantavidrios eléctricos. Nos cuesta aceptar que un vehículo OKM de nuestro mercado presente manijas para levantar los vidrios, más allá de la búsqueda por ofrecer la mejor relación precio-producto posible. Esta versión tampoco dispone de comandos de audio al volante ni computadora de abordo.
Las llantas de chapa de 14″ calzan neumáticos de medidas 175/65 R14 al igual que la rueda de auxilio. Sin embargo, en la versión SEL son de aluminio y de 15″, con neumáticos 195/55 R15.
Incorpora un equipo de audio con CD/Mp3/Bluetooth y conexión USB/AUX. Además, incluye un soporte para dispositivo My Ford Dock, que ocupa el lugar que en las otras dos versiones tiene asegurado la pantalla multifunción monocromática para operar el sistema de conectividad SYNC. Por otra parte, la climatización está a cargo de un aire acondicionado manual con filtro de polen. Otros aspectos para destacar de su equipamiento, que contribuyen a una mayor calidad de vida abordo y confort, son la apertura interna del baúl y el cierre centralizado con mando a distancia.
En términos de seguridad, la opción de entrada de gama no trae mucho más que lo exige la ley. Viene provisto de cinco cinturones de seguridad inerciales de tres puntos (delanteros con ajuste en altura). Por su parte, los cinco asientos cuentan con sus respectivos apoyacabezas.
Los frenos (a discos delanteros y a tambor traseros) están complementados por el sistema Antibloqueo (ABS) con la Distribución Electrónica de Frenado (EBD) y el Asistente para Frenado de Emergencia (EBA). Por otra parte, trae anclajes ISOFIX y Top Tether (superiores) para sillas de seguridad infantiles, y pensando en los más chicos, resulta importante su cierre automático de puertas en rodaje a partir de los 15 km/h.
Lo mejor en términos de protección llega recién en la versión SEL, con los Controles de Estabilidad y Tracción, y el Asistente para Arranque en Pendientes (Hill Holder). Sin embargo ninguna de las tres versiones ofrece airbags adicionales a los frontales para conductor y acompañante.
En las pruebas de frenado nos dejo un poco de sabor a poco, para detener al Fiesta Ka+ necesito 44,8 metros para detenerse completamente cuando circulábamos a 100 km/h.
La nueva silueta también llega de Brasil con el motor naftero Sigma de 1.5 litros y 16 válvulas que eroga una potencia de 105 CV (10 CV más que el propulsor anterior) y alcanza un torque máximo de 138 Nm a 4.500 rpm. Vale la pena recordar que esta motorización está compuesta estructuralmente de aluminio. Además, cuenta con un sistema de partida en frío Ford Easy Start que disminuye la cantidad de combustible a utilizar en los arranques. Otro punto interesante a tener en cuenta es que el modelo proviene de fábrica con correa dentada, que según fuentes de Ford, debe reemplazarse cada 120.000 kilómetros. El Ka + también con una transmisión manual de cinco marchas, la misma que está montada en el Focus, con un funcionamiento adecuado y en relaciones lógicas. Nada para reprocharle en este aspecto.
Las sensaciones al volante son las mismas que con el hatchback. En las marchas más bajas, lo notamos con gran respuesta y agilidad, sin producir ruidos fuertes. Pero al incrementar la velocidad y llegar a la cuarta y quinta marcha lo encontramos un tanto remolón. De todos modos, para contar con mayor precisión, lo evaluamos con nuestro propio instrumental, obteniendo registros de aceleración, recuperación y consumos de combustible a diferentes velocidades.
En los ensayos de aceleración alcanzar los 100 km/h partiendo de cero nos demandó 10,67 segundos; apenas 16 centésimas más que el hatch. En términos de consumo circulando en ruta a 100 km/h fueron necesarios 5,5 litros para recorrer los 100 kilómetros, permitiendo con su tanque de 52 litros una autonomía de 945 kilómetros; mientras en el ámbito urbano necesitó 8,7 litros para 100 km citadinos.
Una vez más destacamos a la dirección asistida eléctrica de Ford porque es un verdadera aliada: suave y dócil en ciudad, ideal para maniobras de estacionamiento, y con mayor asistencia para dar firmeza y control cuando subimos de velocidad. Las suspensiones equilibradas que presenta absorben bien los obstáculos de las calles asegurando el confort de marcha en el habitáculo. Esta sin dudas es una de sus principales virtudes.
En autopistas y ruta, se mostró estable y firme, incluso en curvas exigidas, sin mostrar ninguna tendencia inestable a pesar de la incorporación de un volumen más por el baúl. Recordemos que la versión de entrada de gama no viene provisto de Control de Estabilidad, con lo cual hay que tener en cuenta las limitaciones ya que éste es un auto lógico, ideal para el uso diario y familiar.
Precios:
La gama Ka+ está conformada por tres versiones con lo siguientes precios vigentes al mes de mayo de 2017: S ($237.900), SE ($255.200) y SEL ($276.100). Si lo comparamos con el Ka cinco puertas, en cada versión, los precios son levemente superiores, no llegan a los 3.000 pesos de diferencia.
Los mantenimientos programados de Ford se realizan cada 15.000 kilómetros. En el valor se incluyen todos los servicios, reemplazo de aceite, filtro de aceite, filtro del habitáculo y más de 25 operaciones de control del vehículo especificadas en el manual de mantenimiento.
Los valores de los services son iguales a los de Ka hatchback: 15.000 km ($3.910), 30.000 km ($4.170), 45.000 km ($5.920), 60.000 km ($5.850), 75.000 km ($3.900), 90.000 km ($6.110), 105.000 km ($4.400). En la reñida competencia de su segmento, si tenemos en cuenta las versiones base, el Ka + se presenta como una opción más barata frente a modelos como Toyota Etios, Fiat Siena, Volkswagen Polo y Voyage. Sólo aparecen con menor valor, el Renault Logan y el Chevrolet Onix Joy.
A continuación detallamos el cuadro con prestaciones y consumos:
Valores obtenidos con nuestro equipo de medición de performance | ||
Aceleración< | ||
0 a 100 km/h | 10,67 seg | 180,99 m |
0 a 100 m | 7,47 seg | 81,94 km/h |
0 a 200 m | 11,35 seg | 103,66 km/h |
0 a 300 m | 14,55 seg | 121,24 km/h |
0 a 400 m | 17,38 seg | 132,10 km/h |
0 a 1000 m | 31,70 seg | 167,18 km/h |
Consumo | |||
Velocidad | Régimen motor | Consumo | Autonomía |
a 100 km/h | 2.850 RPM | 5,5 l/100km | 945 km |
a 130 km/h | 3.700 RPM | 7,4 l/100km | 702 km |
Urbano | 8,7 l/100km | 597 km |
Recuperación de 80 km/h a 120 km/h |
|
En 4ta | 14,48 seg |
En 5ta | 21,23 seg |
Parte trasera bien integrada al conjunto | Faltantes de equipamiento |
Capacidad de baúl | Falta indicador temperatura del motor |
Consumos moderados | Posición de conducción |
Habitabilidad | |
Agilidad en ciudad | |
Dirección eléctrica |
Características Ford Ka+ SE |
|
Motor | Nafta 4 cilindros |
Cilindrada en cm3 | 1.498 |
Potencia CV/rpm | 105/6.000 |
Par máximo kgm/rpm | 14,5/4.500 |
Velocidad máxima km/h | 180 a 5.400 rpm |
Peso en kg | 1.030 |
Capacidad tanque de combustible en litros | 52 |
Capacidad de baúl e litros | 445 |
Neumáticos | 175/65-14 |
Consumo a 100 km/h | 5,3 |
Consumo a 130 km/h | 7,4 |
Consumo urbano | 8,4 |
Precio en pesos | 237.900 |
Garantía | 3 años 0 100.00 km |
es para un matrimonio joven, o sea que un veterano como yo queda queda mal en este auto , tengo que quedarme con mi viejo escort !!!!!