Volvo aprobó un plan de inversiones para los próximos cuatro años de US$14.921 millones, desglosado en el lanzamiento de nuevos productos, innovación tecnológica y en planes de transformación en otros ámbitos de la marca sueca.
La firma automovilística ha señalado que el actual ejercicio es de crecimiento y, bajo esta premisa, se ha confeccionado dicha inversión. La base para el año 2014 se inició en el 2013, un intenso año para Volvo donde la compañía continuó con su viaje de transformación y mejoras en las ventas mundiales.
Durante la celebración del Salón del Automóvil de Detroit, el presidente de Volvo, Hakan Samuelsson, señaló que los resultados de la compañía retornan a beneficios, y el año en curso se caracteriza por una fuerte presencia en China y una gran recuperación y crecimiento en EE.UU. En este sentido, el SUV XC90 será el primer modelo que se fabricará bajo la nueva plataforma de arquitectura escalable de producto de la compañía, y será pionero en mostrar el nuevo lenguaje de diseño, adelantado en los Volvo Concept Coupé y Volvo Concept XC Coupé.
El nuevo XC90 que recibirá la generación de motores Drive-E, anticipa una versión eléctrica y se complementa con nuevos sistemas de seguridad. Un nuevo mecanismo que integra el sistema City Safety es el método de control de Crucero Adaptativo con asistencia en la dirección; una tecnología que ayuda al conductor a mantenerse en su carril y seguir el ritmo del tráfico de forma automática siguiendo al vehículo que circula por delante. Además, este nuevo mecanismo de seguridad incluye la detección de peatones en la oscuridad, que refuerza los sistemas de detención ante otros vehículos, peatones y ciclistas.