Es oficial: Great Wall inició la producción en la planta brasileña de Iracemápolis y acelera su plan industrial para la región

Great Wall Motors (GWM) dio un paso clave en su estrategia para Sudamérica con la inauguración oficial de su fábrica en Iracemápolis, São Paulo, instalaciones que anteriormente pertenecían a Mercedes-Benz. El acto, realizado este 15 de agosto, contó con la presencia del presidente Lula y referencias al programa MOVER y al Plan de Movilidad Verde con el que el gobierno brasileño busca impulsar la electrificación y la movilidad sustentable.

La planta iniciará operaciones enfocada en la producción de la línea de SUV’s de Haval, que incluye los modelos H6 en sus versiones híbrida (HEV), híbrida enchufable (PHEV) y la variante coupé GT. A futuro, estas versiones recibirán un motor 1.5 turbo Flex, una configuración que se sumará a la oferta híbrida y PHEV, con el objetivo de ampliar el atractivo del modelo en el mercado brasileño. Actualmente, solo Toyota ofrece híbridos flex en el país, aunque ninguno de ellos cuenta con la tecnología enchufable.

La capacidad de producción alcanzará las 50.000 unidades anuales, con un plan de expansión que incluye más contrataciones y el fortalecimiento de la red de proveedores locales. Iracemápolis también funcionará como base de exportación hacia otros mercados de Latinoamérica. La inversión que se desembolsará es de 10.000millones de reales en 10 años.

Además del H6, la marca adelantó que sumará a la pick up híbrida Poer y el SUV Haval H9, ambos con motorización turbodiésel 2.4 y caja automática de 9 marchas junto con tracción integral. Este conjunto mecánico, que en otros mercados rinde 186 CV y 48,9 kgm de par, podría recibir ajustes específicos para Brasil. La ofensiva de producto incluirá también a la marca Wey, que desembarcará en 2025 con el SUV 07. Con más de 5 metros de largo y 3 metros de distancia entre ejes, este modelo puede configurarse para seis o siete plazas y, en China, desarrolla 516 CV y 93 kgm gracias a un sistema híbrido con motor 1.5 turbo y dos impulsores eléctricos, alimentados por una batería de 44,3 kWh.

La operación brasileña emplea actualmente a 600 personas, con la meta de superar los 1.000 puestos directos a fin de año y alcanzar los 2.000 a medida que crezcan las exportaciones. Otro anuncio destacado fue la creación de un Centro de Investigación y Desarrollo (I+D) junto a la planta, que se especializará en tecnología flex-fuel y en la adaptación de vehículos globales a las condiciones y preferencias locales. El complejo contará con 15.000 m2 de superficie total, de los cuales 4.000 m2 serán construidos.

En términos productivos, GWM aplicará un sistema de montaje pieza por pieza -más complejo que los esquemas CKD o SKD- y desde el primer año incorporará componentes locales, incluyendo el proceso de pintura.

Jonathan Romero