Mientras avanza el desarrollo de la nueva generación de la Ranger, con unidades de prueba circulando en Estados Unidos con cada vez menos camuflaje, Ford está dando los pasos necesarios para oficializar su llegada hacia 2023: meses atrás, anunció una inversión de U$S 580 millones en la planta de General Pacheco para producir la pick up en Argentina y ahora anunció otra inversión, en este caso de U$S 1.000 millones en el complejo industrial de Silverton en Sudáfrica. La diferencia en el monto es porque no estará sola, sino que también incluye la fabricación de la nueva Volkswagen Amarok.
Como ya se sabe, la marca estadounidense y su par alemana firmaron una alianza para el desarrollo de su próxima generación de pick ups medianas, que también abarca el uso de plataformas en común para vehículos comerciales, eléctricos y tecnología de conducción autónoma. En este caso, la operación en Sudáfrica corresponde al denominado Proyecto Cyclone y la planta de Silverton tendrá, al menos por ahora y hasta que se realicen nuevos anuncios, exclusividad en la producción de la Amarok, ya que no se fabricará en Hannover ni en Pacheco. Vale recordar que si bien en un primer momento sí estaba planificada la producción de ambas pick ups en Argentina, la firma de Wolfsburg decidió cancelar el proyecto a nivel local, manteniendo la fabricación de la actual Amarok hasta nuevo aviso. Por su parte, la firma del óvalo sí confirmó que continuará adelante con la nueva Ranger.
El comunicado oficial destaca: “Esta inversión modernizará aún más nuestra operación en Sudáfrica, ayudando a desempeñar un papel más importante en nuestra reestructuración y crecimiento de la operación automotriz global, así como en nuestra alianza estratégica con Volkswagen. Ranger es uno de nuestros vehículos globales de mayor volumen y éxito. Esta inversión equipará a nuestro equipo con las herramientas e instalaciones necesarias para entregar la mejor Ranger de todos los tiempos, con una calidad superior y en grandes cantidades”.
Una vez que se concrete, será el desembolso más grande de Ford el país africano, en el que ya lleva 97 años operando. Con el nuevo equipamiento, la factoría pasará a contar con una capacidad de producción de hasta 200.000 unidades por año, frente a las 168.000 unidades actuales. Por supuesto, además de abastecer al mercado local, la mayor parte de ese volumen estará destinado a la exportación a más de 100 países. Asimismo, generará 1.200 nuevos puestos de trabajo, llegando a un total de 5.500 operarios.
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