El miércoles, Stellantis anunció el inicio de la producción del Citroën Basalt en la planta brasileña de Porto Real, incorporando el tercer integrante del denominado Proyecto C-Cubed y a la vez dando el puntapié inicial para un nuevo ciclo de inversiones en el complejo industrial. Si bien al tratarse de un evento enfocado en la marca francesa no se dieron más detalles, los propios directivos anticiparon que la factoría podrá ser utilizada por productos de varias marcas del Grupo. Es ahí donde el Jeep Avenger entra en juego, considerando que comparte la plataforma CMP con el C3, C3 Aircross y Basalt.
De acuerdo a medios de prensa del país vecino como Noticias Automotivas y Auto Indústria, la compañía apunta a sumar la producción del nuevo B-SUV de la firma estadounidense complementando así al exitoso –pero ya veterano- Renegade y que la planta de Pernambuco se especializa en vehículos que utilizan la plataforma Small Wide 4×4, por lo que no podría agregar un nuevo modelo sin una ampliación e inversión muy grande. En cambio, Porto Real ya es apta para ello.
De esta manera, vuelven a tomar fuerza los rumores sobre la producción regional del Avenger, del que ya se venía hablando e inclusive algunos medios anticipaban que podría contar con la tecnología de electrificación BioHybrid, con un sistema mild-hybrid de 48V en algunas de sus versiones.
Con un porte algo más pequeño que el Renegade, el diseño del Avenger combina los rasgos clásicos de Jeep con identidad propia y también algo del family feeling actual: en el frente se destaca la infaltable parrilla de las 7 y los faros de Led rectangulares –divididos por las luces de circulación diurna- El paragolpes cuenta con una toma de aire de formato trapezoidal y protecciones plásticas en la zona inferior, al igual que los guardabarros, zócalos y los bajos de la carrocería. De perfil sobresalen los marcados pasarruedas que transmiten una sensación de mayor robustez y una línea de cintura alta, sin tercera ventanilla en el pilar C y con las manijas de las puertas traseras “escondidas” en el marco.
Para nuestra región, la gama del B-SUV estaría compuesta por tres versiones, algo lógico teniendo en cuenta además que no debe acercarse tanto al Renegade para no quitarle ventas. Desde Jeep, apuntan a competir con la Volkswagen T-Cross y Nivus, Chevrolet Tracker, Fiat Pulse y Nissan Kicks, con la ventaja que ninguno de ellos cuenta con versiones electrificadas. También podría sumarse, más adelante, la variante 100% eléctrica que se comercializa en Europa.