
Audi prepara la próxima novedad en su gama de vehículos eléctricos: el Q6 e-tron está en su fase final de desarrollo y para demostrarlo, la firma de Ingolstadt publicó una serie de fotografías que muestran parte de su diseño y anticipan algunas de sus características más innovadoras, aunque por supuesto, sin develarlo por completo.
Las imágenes corresponden a una unidad con un camuflaje que en la compañía denominan diseño de librea, con un colorido patrón de formas rectangulares que dejan ver algunos rasgos de su diseño pero ocultan pequeños detalles. En este caso, la compañía puso el foco en su innovadora firma lumínica digital activa, mediante la cual el conductor podrá elegir entre diferentes diseños personalizados desde el sistema multimedia MMI o desde la aplicación MyAudi, tanto para los faros delanteros como para los posteriores, ambos con tecnología Oled. Más allá de ser un opcional y de una función estética, también servirán para enviar mensajes a otros conductores, ciclistas y/o peatones, alertando de accidentes o averías al replicar diferentes símbolos, como de asistencia de emergencia, de peligro, etc. Además de ofrecerse como un equipamiento opcional al momento de la compra, también podrá ser adquirido luego, mediante actualizaciones remotas.
“Es la primera vez que en un modelo de producción en serie diseñamos tanto la forma de las luces como todo su movimiento y posibilidades de animación. Hemos dotado a la firma lumínica de su propia personalidad. El Q6 e-tron inaugura una nueva era de diseño distintivo y estética exclusiva en Audi”, señaló César Muntada, Director de Diseño de Iluminación de la marca.
Desarrollado sobre la plataforma modular PPE (que será compartida con la próxima generación del Porsche Macan, también en desarrollo), contará con un diseño con ciertos rasgos compartidos por sus hermanos mayores pero también propios, posiblemente anticipando la estética de los futuros vehículos eléctricos de la firma de Ingolstadt, con faros más rasgados, la característica parrilla singleframe carenada y una máscara de color negro que cubre gran parte del frente. Su perfil será inconfundiblemente Audi, con trazos rectos y un diseño que recuerda a otros SUV’s como el Q5 o Q7.
Más allá de estas cuestiones –ocultas por el camuflaje de las unidades de pruebas-, medios de prensa europeos adelantan que se ofrecerán dos alternativas de baterías –ambas de iones de litio-, que tendrán una capacidad de 83 y 100 kWh, suficientes para otorgarle una autonomía de hasta 700 kilómetros en el caso de la última y que podrán recargarse rápidamente gracias al sistema de 800V –permitirá recuperar hasta un 80% en solo 10 minutos-.
En cuanto a su motorización, también se habla de dos configuraciones, con uno o dos motores eléctricos, con tracción trasera o integral quattro respectivamente. En el caso de la más potente, desarrollará unos 360 CV, contará con la mencionada tracción integral quattro y una caja de cambios automática de dos marchas, que estará integrada al motor trasero.
Su puesta a punto buscará brindar un equilibrio entre deportividad y dinamismo, pero también con un elevado nivel de confort, con una gran aceleración producto del torque instantáneo de los motores eléctricos y una velocidad máxima que estará limitada a unos 200 km/h, tanto por seguridad como para no comprometer en demasía la autonomía. También tendrá una versión deportiva, el RSQ6 e-tron, cuyas cifras de potencia y rendimiento aún se desconocen.