DS, ya instalada como marca independiente dentro del Grupo PSA, anunció una importante apuesta por la electrificación, con el objetivo de que todos sus productos cuenten con una versión de este tipo para los próximos años. Y ya demostró avances en concreto en este aspecto: en el Salón de Shangai, la automotriz francesa presentó los DS 3 Crossback E-Tense y DS 7 Crossback E-Tense 4×4, modelos que serán dos de sus pilares para los próximos años.
Empezando por el DS 3 Crossback E-Tense, es la variante 100% eléctrica del B-SUV que nació para complementar –y posiblemente suceder- al DS 3 hatchback que ya conocemos. En este caso, desarrollado sobre la plataforma e-CMP, cuenta con un motor eléctrico de 136 CV (100 kW) y 260 Nm de torque, asociado a una batería de iones de litio de 50 kWh y a un sistema de recuperación de energía en el frenado y desaceleraciones.
Adicionalmente, dispone de tres modos de conducción seleccionables: Eco, para aumentar la autonomía; Normal, que apunta a un equilibrio entre autonomía y prestaciones; y Sport, que privilegia el par y las prestaciones. También aprovechó de la experiencia de DS en la Fórmula E, los dos modos de recuperación de energía: Normal, para simular el comportamiento de un motor de combustión, o Brake, que aplica una deceleración de 1,3 m/s2. Además, agrega una función que permite preacondicionar la temperatura del habitáculo y de la batería antes de salir, gracias a una bomba de calor.
Con todos estos sistemas, el DS 3 Crossback E-Tense logra una autonomía de hasta 430 kilómetros según ciclo NEDC (o 320 km en ciclo WLTP). Por su parte, utilizando un cargador rápido de 100 kW es posible recargar el 80% de la capacidad de las baterías en 30 minutos. Además, la marca ofrece un cargador DS Smart Wallbox, que en su versión trifásica permite una carga completa en 5 horas y en el caso de la monofásica, el tiempo de reabastecimiento total es de 8 horas.
La otra novedad fue el DS 7 Crossback E-Tense 4×4, la variante híbrida del SUV mediano que cuenta con tres motores: un propulsor naftero de 200 CV asociado a dos motores eléctricos de 109 CV (80 kW) cada uno y a una caja automática de 8 marchas adaptada para vehículos electricifados. Con este conjunto motriz, desarrolla una potencia combinada de 300 CV y 450 Nm de par.
En este caso, el DS 7 Crossback E-Tense dispone de cuatro modos de conducción: Electric (100% eléctrico, con silencio de funcionamiento y cero emisiones de CO2); Sport (para mayores prestaciones y una experiencia de conducción más dinámica); Hybride (optimiza las prestaciones del vehículo y el consumo de energía a 2,2 l/100km en uso mixto, según información oficial); y 4WD (que aumenta la motricidad y adherencia en superficies húmedas, arena o nieve).
En modo 100% eléctrico, el DS 7 puede recorrer hasta 50 kilómetros gracias a su batería de 13,2 kWh de capacidad, que se recarga en 1,45 horas y cuenta además con dos modos de recuperación de energía: Brake, para aumentar su autonomía y E-Save, que reserva energía para utilizar el modo eléctrico en una parte del recorrido.
Estéticamente, el E-Tense sólo se diferencia de las versiones convencionales por las llantas de aleación London de 19 pulgadas y el color Cristal Pearl que se agrega como opción a la paleta de colores disponibles. En el interior, cuenta con las terminaciones DS Rivoli, con revestimientos en color Gris Galet. Al contar con las baterías ubicadas debajo del piso del vehículo, la habitabilidad y capacidad del baúl no se vieron afectadas.
