Jamás tuve que parar tantas veces para mostrar un auto, nunca respondí a tantas inquietudes con un vehículo de prensa. Cada vez que cargué nafta tuve que abrir el capot para mostrarles el motor. Creo que en mi vida me miraron tanto, ni siquiera cuando era joven y pesaba como 20 kilos menos.
Desde que salimos de la Planta que la marca del óvalo tiene en Pacheco y durante toda la semana de pruebas, recibimos diferentes tipos de manifestaciones: dedos levantados en símbolo de aceptación y admiración, fotografías tomadas desde cualquier vehículo y lugar, y preguntas permanentes.
Pensándolo bien, semejante reacción no es tan difícil de interpretar. No hay muchos vehículos de sus características circulando por nuestras calles: por historia, estética, potencia, envergadura y sobre todo mística. Es que, además, el Mustang, pues de él estábamos hablando, generó a lo largo de su historia fanáticos provenientes de todas las marcas´con un nombre propio, tal es así que solo la marca Ford se observa en el parabrisas.
Es un auto que ya pasó los 52 años de exitosa vigencia en los mercados del mundo con más de 9 millones de unidades vendidas. El año pasado, después de una espera ansiosa, llegó al país con su sexta generación, manteniendo la esencia con el ADN característico pero con líneas más modernas en el diseño para adaptarse a los tiempos que corren.
Para que te vayas entusiasmando te contamos que se mueve con asombrosa soltura gracias a un propulsor de 5 litros y 421 CV. Pero no queremos dar más datos. No podemos hacerte perder ni un segundo más para que aproveches a full está posibilidad de conocer a un emblemático del selecto grupo de los Muscle Car.
Diseño Exterior:
La sexta generación del Mustang muestra un vehículo con la esencia de siempre, respetando sus rasgos históricos, pero con líneas más modernas y elegantes, a la conquista de nuevos clientes. En nuestra experiencia personal, nunca nos sentimos tan observados a bordo de un auto. Es que, antes que nada, llama mucho la atención por sus tremendas dimensiones. Pasa por las calles y se van dando vuelta para mirarlo, pues cada uno de sus ángulos expresa la robustez y deportividad que cautivan a todos los públicos.
La zona frontal impone su personalidad a través de ópticas afiladas (con faros bixenón), una enorme parrilla hexagonal con el pony cromado en el centro y dos pronunciadas nervaduras que terminan delineando una franja en el centro. Además, incorpora luces diurnas LED y faros antiniebla.
En los laterales también impresiona con rasgos acentuados, hombros anchos y una extensión que parece no tener fin. A su vez, una línea une prácticamente los pasarruedas delanteros y traseros, a la altura de las manijas de puertas. Sobre la zona inferior hay una nervadura mucho más marcada.
Por su parte, sus neumáticos Pirelli PZero se presentan en dos medidas diferentes: 255/40 R19 adelante y 275/40 R19 atrás. Ambas llevan llantas de aleación de 19” con un formato en forma de múltiples Y.
Hacia atrás exhibe la caída pronunciada de su techo que le proporciona un sello distintivo. En el sector posterior se destacan sus luces traseras con tecnología led formando tres lineas verticales, el difusor de aire y la doble salida de escape terminan de configurar un remate bien deportivo.
Sus dimensiones fueron configuradas con 4,78 metros de largo, 1,90 metros de ancho y 1,38 metros de alto. En relación al modelo anterior es más bajo y más ancho. Por otra parte se comercializa en una interesante gama de colores: rojo, azul, negro, gris y plata (un gris más claro).
Diseño Interior:
En el habitáculo del Mustang también queda claro que se trata de un auto puramente deportivo, un muscle car único en que los diseñadores reinterpretaron el interior clásico con detalles modernos. No es lujoso pero reúne una serie de particularidades que lo hacen distinto a todos.
Se combinan colores negros con grises e inserciones cromadas y con algunos materiales que podrían mejorarse. Su tapizado es de cuero microperforado. Por otra parte, en varios lugares aparecen los famosos poníes que identifican al modelo, como el que se ubica en el centro de su gran volante multifunción.
Para destacar dentro del habitáculo tenemos que citar a sus dos grandes pantallas, la de la computadora de abordo en el tablero de instrumentos y la táctil central que sirve para operar el sistema SYNC, y los comandos de aluminio similares a los de la cabina de un avión, ubicados debajo de los botones que se utilizan para manejar el climatizador automático.
Las butacas delanteras deportivas son anchas, con buenas sujeciones, resultan bien confortables y se logra una perfecta postura de conducción, incluso pueden refrigerarse o calefaccionarse. La del conductor tiene ocho ajustes eléctricos de posición (incluso el de la zona lumbar), aunque la inclinación del respaldo es de forma manual y carece de memoria de posición de asiento. En el caso del acompañante se regulan en seis posiciones. De esta manera resulta sencillo que los privilegiados de las plazas delanteras consigan viajar cómodamente.
Atrás la cuestión varía un poco, como es lógico de imaginar, la habitabilidad en las plazas traseras no es una de sus mayores virtudes. Antes que nada, cuesta ingresar porque se debe recurrir a la clásica operación de toda coupé: correr el asiento delantero hacia adelante para poder pasar. Atrás está configurado para dos plazas y son más cómodas de lo que suponíamos. Están ubicadas como en pozos, más bajas para que los que viajan allí no tengo problemas tanto problema con el techo, aunque tenemos que decir esa distancia es limitada para que viajen personas de baja altura o niños.
El Mustang no cumple con la regla de todos los deportivos, donde el baúl es prácicamente simbólico. En este caso dispone de una capacidad de 408 litros que puede ampliarse reclinando por mitades el respaldo trasero. Debajo del piso del baúl guarda una rueda de tipo temporal y que solo puede ser utilizada en el tren trasero debido al tamaño de los calipers del tren delantero. Para las cubiertas delanteras viene provisto de un kit antipinchazos con compresor. Este sin dudas es uno de los puntos desfavorables de su equipamiento aunque sabemos que la razón de esta decisión responde a la necesidad de ganar mayor espacio de carga. En el lateral derecho encontramos un Woofer de grandes dimensiones.
Instrumental:
El panel de instumentos no pasa inadvertido y tampoco fue dejado para lo último al momento de diseñar el auto. Es grande, ofrece buena lectura y aporta mucha más información de la que imaginábamos. Son dos grandes cuadrantes circulares. Uno para el cuentarrevoluciones y el indicador de temperatura del líquido refrigerante. El otro, para el velocímetro (marca hasta 260 km/h y en millas en la parte interna) y el indicador del nivel de combustible.
En el rectángulo central y en colores aparece la info de la computadora de abordo que, más allá de lo tradicional, informa sobre la temperatura de la transmisión y la tapa de cilindros, indica consumos en diferentes velocidades y hasta sirve como cronómetro en pista.
En términos de error de velocímetro lo medimos a distintas velocidades, es así que registramos que para 80 km/h de velocidad la real era de 77 y así sucesivamente, para 100 km/h 97; para 120 km/h 116 y finalmente para 130 km/h fue de 126. El error promedio teniendo en cuenta las diferentes velocidades fue de 3,3%,
Equipamiento:
Este Muscle Car le hace un homenaje permanente a la historia pero incorpora las últimas tecnologías. Por eso, entre otras cosas, tiene un sistema de apertura de puertas y encendido del motor sin llaves. Además, incorpora un sistema de control para llaves auxiliares FordMyKey.
Su pantalla multimedia táctil de 8 pulgadas está ubicada en el centro de la plancha de abordo e incorpora el sistema de conectividad SYNC 3, con reconocimiento de voz (se puede regular el climatizador automático o seleccionar un tema musical en forma oral) y sistema de navegación GPS 3D. Además, brinda la posibilidad de conectar el smarphone con el Mustang mediante Android o Apple Car Play.
El equipo de audio Hi-Fi Shaker Pro es acorde a la magnitud del vehículo y despliega un sonido de alta fidelidad a través de 12 parlantes y un subwoofer que está ubicado en el baúl, aunque el mejor sonido es el que surge debajo del capot.
Con semejantes dimensiones, eran de esperar los sensores de estacionamiento con que está equipado. Y se complementan con la cámara de visión trasera. Todo el conjunto resulta muy útil a la hora de encarar la difícil tarea de estacionar el Mustang. Los limpiaparabrisas cuenta con intemitencia variable con sensor de lluvia y las luces se encienden automáticamente cuando la situación lo requiere. A su vez, cuenta con Control de Velocidad Crucero y Limitador de Velocidad.
El Mustang dispone de un sistema denominado Track Apps, que mantiene las ruedas delanteras frenadas mientras las traseras quedan libres para poder acelerarlas, quemando caucho y tomando temperatura y de esa manera tener un mejor agarre en aceleraciones con partida detenida.
Seguridad:
Como repetimos varias veces, el Mustang es un auto diferente, con personalidad distintiva, único. También marca esa diferencia a nivel de protección porque en esta materia no hay otro deportivo que traiga tanto equipamiento.
Los ingenieros de Ford no quieren ni escuchar hablar de siniestros. Por eso lo equiparon con un completo listado de asistentes y dispositivos de seguridad activa. En primer término hay que destacar sus frenos a discos en las cuatro ruedas con pinzas Brembo en el tren delantero de 6 pistones. El Sistema Antibloqueo ABS está complementado por la Distribución Electrónica de Frenado y el Asistente al Frenado de Urgencia.
Teniendo en cuenta las prestaciones que puede desarrollar este tremendo Muscle Car, viene equipado con sistemas que pueden aparecer como verdaderos salvadores en situaciones complicadas, como los Controles de Estabilidad, Tracción y de Torque en Curvas. A su vez, también son de gran utilidad el Asistente para Arranque en Pendientes y el Control de Presión de Neumáticos (advierte al conductor sobre la presión de cada rueda y así puede estar informado sobre si alguna de ellas perdió carga).
Nadie puede prevenir del todo un siniestro porque no hay sistema que pueda contrarrestar cualquier imponderable como así también a la imprudencia o el error humano. Por ello dispone de un conjunto de ocho airbags (frontales, laterales delantero, de cortina y de rodillas para conductor y acompañante), dos cinturones de seguridad delanteros inerciales de 3 puntos con pretensores y dos conturones de seguridad traseros inerciales de tres puntos, con anclajes para sillas ISOFIX.
En el caso de que se produzca el impacto, además de la acción de los mencionados airbags, se pone en funcionamiento un sistema de activación de balizas y desbloqueo de puertas post-colisión. De esta manera se facilita el egreso del vehículo y alerta al resto de los conductores para evitar ser embestidos.
Motorización, transmisión y comportamiento:
¿Qué sería del Mustang sin lo que guarda debajo del capot? Allí está el corazón de este deportivo de pura raza. Un descomunal V8 de 5.000 cm3, con 32 válvulas, inyección directa y admisión variable, que eroga 421 CV a 6.500 rpm, alcanza un torque de 530 Nm a 4.250 rpm y sobre todo emite un sonido ronco que hace dar vuelta a todo el mundo para ver que se acerca. El propulsor está asociado a una transmisión automática de seis velocidades con levas al volante que conecta las marchas eficientemente.
Con sus 1.700 kilos a cuestas, logramos una aceleración de 0 a 100 km/h en 5,2 segundos y 16,72 segundos para llegar a los 200 km/h con pasajes de cambio que se estiraron hasta las 6.500 rpm. Por su parte la velocidad máxima se encuentra limitada 250 km/h. Si hablamos de placer, nada como acelerarlo a fondo, al encarar un sobrepaso, sin poder calcular el límite de sus posibilidades, sintiendo que el cuerpo se va hacia atrás y el auto sale como eyectado hacia adelante. En nuestros ensayos para pasar de 80 a 120 km/h fueron necesarios apenas 3,42 segundos.
También realizamos nuestras pruebas de consumo; a 100 km/h y a un regimen de vueltas de 1.850 rpm (muy relajado) nos permitió consumir 8,8 litros para los 100 kilómetros, mientras cuando lo hicimos a 130 el valor llegó hasta los 11,4 l/100 km. Ahora circulando por la ciudad de Buenos Aires la demanda de combustible llegó hasta los 17.6 l/100km, un valor que era de esperar para un V8 de 5 litros y 421 cv.
En cuanto a autonomía (tiene un tanque de 61 litros) que siempre es poca y necesita cargar combustible más seguido. En ciudad permite realizar 316 kilómetros sin reaprovisionamiento, mientras que en ruta a 100 km/h sube hasta los 693 km.
Cuántos nos habrán envidiado durante la semana de prueba con el Mustang. Esa una de las experiencias que merecen ser vividas. Por eso las disfrutamos a pleno. Pero más allá del mundo de las sensaciones, que pueden ser subjetivas, en lo estrictamente racional afirmamos que este auto tiene una conducta enérgica, agresiva, potente pero a la vez muestra firmeza, aplomo y control. A pesar de sus tremendas prestaciones deportivas nunca vimos comprometida la seguridad de marcha.
Es evidente que su hábitat natural son los asfaltos en buen estado, rutas y autopistas, pero a la hora de la puesta a punto también fue configurado para ofrecer confort de marcha en ciudad, aunque lógicamante con alguna mayor dureza. Su conjunto de suspensiones independientes con barra estabilizadora (antes la trasera era rígida) le permiten absorber bien las irregularidades, aunque le juega un poco en contra su bajo despeje al suelo y hay que estar atento en los lomos de burro, cordones o cunetas.
Con un largo de 4,74 metros de largo y un ancho de 1,91 metros, las maniobras de estacionamiento son un poco más dificultosas, porque si miramos hacia los costados parecería que el Mustang nunca termina.
La dirección también es una buena aliada para poder movilizar semejante vehículo. Se puede setear su dureza según las condiciones de manejo (Normal, Sport y Confort) pudiendo elegir distintas experiencias de conducción.
El Mustang nos da la posibilidad también de elegir entre diferentes modos de conducción (Normal, Sport, Track y Snow) que interfieren y varían la respuesta de la caja y el acelerador en función de la opción que hayamos seleccionado. Con todas estas variantes, el Mustang nos permite divertirnos buscando diferentes opciones. cuando lo utilizamos en modo Normal.
Cuando lo utilizamos en modo Normal una serie de asistentes están alertas para corregir cualquier situación complicada que ponga en riesgo la estabilidad, maniobrabilidad y tracción.
En el caso del modo Track el pedal del acelerador dispone de mayor sensibilidad y se desconectan completamente tanto el control de tracción como el de estabilidad, con un seteo más para conductores experimentados en esta potencia y tracción trasera. En el caso del modo Snow se reduce el par motor quitando sensibilidad al acelerador y haciendo más sensible el control de tracción y estabilidad.
El poder frenante del nuevo Mustang es excepcional, sobre todo teniendo en cuenta su peso; es que sus discos de 380 mm x 34 mm y pinzas Brembo fijas de seis pistones sobre las ruedas delanteras y de 330 mm x 25 mm en el tren trasero hacen maravillas. En las pruebas que realizamos, el Mustang se detuvo de 100 km/h a cero en tan solo 36,9 metros.
Precio:
El valor de comercialización del Ford Mustang en Argentina es de USD 95.000. Para este producto, la marca del óvalo ofrece una garantía de 3 años o 100.000 kilómetros, lo que ocurra primero.
Los precios sugeridos al público para los mantenimientos programados, desde el 1 de febrero al 30 de abril de 2017, son los siguientes: 15.000 kilómetros ($6.450), 30.000 kilómetros ($9.170), 45.000 kilómetros ($6.450), 60.000 kilómetros ($13.660), 75.000 kilómetros ($6.450), 90.000 kilómetros ($9.170) y 105.000 ($9.070).
En el valor del service están incluidos los reemplazos de aceite, filtros (aceite y habitáculo) y más de 25 operaciones de control del vehículo especificadas en el manual de mantenimiento. Además, en los servicios de 30, 60 y 90.000 kilómetros, el precio incluye reemplazo de filtros de aire y sustitución de líquido de freno y embrague. En el de los 60.000 se agrega cambio de bujías de encendido.
A continuación detallamos el cuadro con prestaciones y consumos:
| Valores obtenidos con nuestro equipo de medición de performance | ||
| Aceleración | ||
| 0 a 100 km/h | 5,20 seg | 78,75 m |
| 0 a 100 m | 5,92 seg | 109,31 km/h |
| 0 a 200 m | 8,78 seg | 141,62 km/h |
| 0 a 300 m | 11,13 seg | 163,28 km/h |
| 0 a 400 m | 13,23 seg | 178,14 km/h |
| 0 a 1000 m | 23,73 seg | 228,21 km/h |
| Consumo | |||
| Velocidad | Régimen motor | Consumo | Autonomía |
| a 100 km/h | 1.850 RPM | 8,8 l/100km | 693 km |
| a 120 km/h | 2.250 RPM | 10,4 l/100km | 586 km |
| a 130 km/h | 2.450 RPM | 11,4 l/100km | 535 km |
| Urbano | 17,6 l/100km | 316 km | |
| Recuperación de 80 km/h a 120 km/h |
|
| En Directa | 3,42 seg |
| Diseño deportivo | Auxilio temporal |
| Aceleración | Consumo urbano |
| Motor/Prestaciones | Habitabilidad plazas traseras |
| Distancia de frenado | |
| Posición de conducción | |
| Capacidad de baúl |
| Características Ford Mustang GT 5.0 |
|
| Motor | Nafta 8 cilindros en V |
| Cilindrada en cm3 | 4.951 |
| Potencia CV/rpm | 421 a 6.500 |
| Par máximo kgm/rpm | 54,1 a 4.250 |
| Velocidad máxima km/h | 250 |
| Peso en kg | 1.700 |
| Capacidad tanque de combustible en litros | 61 |
| Capacidad de baúl dm3 | 408 |
| Neumáticos | 275/40-19 |
| Consumo a 100 km/h | 8,8 l/100 km |
| Consumo a 130 km/h | 11,4 l/100 km |
| Consumo urbano | 17.6 l/100 km |
| Precio en dólares | 95.000 |
| Garantía | 3 años o 100.000 km |
Un test de esos pocos que por las sensaciones vividas que brinda un auto como esos, perdurará en la historia de 16Valvulas!! Felicitaciones Daniel Panzera.