
Pocos días después de que se filtraran las fotos de su diseño definitivo, finalmente Stellantis presentó en Europa a la tercera generación del Jeep Compass. Y es que el Viejo Continente será uno de sus principales mercados y tuvo mucho que ver en su desarrollo, aunque por supuesto mantiene el estilo y el espíritu aventurero de la marca.
Tal como lo venimos anticipando, el gran salto con respecto al modelo actual se da en su plataforma, dejando de lado la Small Wide 4×4 por la moderna STLA Medium, compartida con los nuevos Peugeot 3008/5008, Citroën C5 Aircross y otros productos de Stellantis, por lo que la electrificación juega un papel importante, pero en el caso del SUV de la firma estadounidense, posee un perfil claramente diferenciado. En cuanto a dimensiones, ahora mide 4,54 metros de largo (+14 cm), 1,90 metros de ancho, 1,67 metros de alto y la distancia entre ejes pasó a 2,77 metros (+13 cm).
Estéticamente, sin alejarse demasiado de la propuesta actual, el nuevo Compass luce trazos más rectos y marcados, ganando una imagen más robusta y agresiva, inspirada en sus hermanos mayores. También tiene más protagonismo la tecnología, con faros de Led y la clásica parrilla de las siete barras, iluminada en su parte superior. Las fotos de prensa, con las mismas unidades que se habían filtrado hace unos días atrás, poseen carrocería bitono, con el techo en negro. La de color verde lima es 100% eléctrica, mientras que la de color blanco, correspondiente a la variante Trailhawk, posee un paragolpes específico, con mayor ángulo de ataque y una suerte de defensa delantera, así como más detalles en negro, resaltando su estilo aventurero.
La otra gran evolución se verá en el interior, con un tablero de diseño más tridimensional, materiales de mayor calidad y mucha tecnología, con instrumental digital, nuevo sistema multimedia -con una pantalla que sobresale del tablero y está ubicada en posición horizontal-, así como vistosos revestimientos en cuero, plástico blando y apliques en aluminio. También se alcanzan a ver ítems como la perilla giratoria para el selector de marchas y el techo panorámico. Equipado con sistemas de asistencia a la conducción de nivel 2, ahora es compatible con actualizaciones remotas para incorporar más funciones.
Mecánicamente, habrá una gran variedad de opciones. En Europa, la gama arrancará con el motor PureTech 1.2 turbo (con cadena de distribución), asociado a un sistema mild-hybrid de 48V, con 147 CV y 230 Nm de torque. La siguiente opción será la híbrda enchufable, con el mismo PureTech 1.2 pero con un motor eléctrico más potente y una batería de 19 kWh de capacidad, con los que desarrolla 197 CV y puede recorrer hasta 83 kilómetros en modo 100% eléctrico.
Mención aparte para las variantes 100% eléctricas, que serán tres: una con tracción delantera, de 213 CV y 350 Nm de par, alimentada por una batería de 74 kWh para una autonomía de 500 kilómetros; una versión intermedia de 234 CV y 350 Nm de torque, con batería de 96 kWh y autonomía de 650 kilómetros; o la opción de tracción integral, con dos motores -uno en cada eje- de 380 CV, batería de 96 kWh y autonomía de hasta 600 kilómetros, compatible con cargadores de hasta 160 kW de potencia.
Con su llegada a Europa prevista para antes de fin de año, producido en la planta italiana de Melfi, su arribo a otros mercados se concretará de manera paulatina. Para nuestra región, seguramente con otras motorizaciones más acordes a la demanda local, habrá que esperar hasta 2026/2027, manteniendo su fabricación en el complejo industrial de Pernambuco, donde será introducida la plataforma STLA Medium como parte de las inversiones previstas de Stellantis.