Exactamente hace un año atrás, Jeep celebraba la producción de la unidad número 350.000 en la planta de Pernambuco. Ahora, a esa cifra se sumaron otras 100.000 unidades para alcanzar –y al día de hoy, superar- las 450.000, lo que refleja el éxito que sigue teniendo el B-SUV. Sólo en el mercado brasileño, el “Baby Jeep” lleva comercializadas más de 67.000 unidades en lo que va de 2021, reafirmando así su liderazgo en el segmento.
Al respecto, Alexandre Aquino, Brand Manager de Jeep para América Latina, expresó: “El Renegade es un referente muy importante de la marca en el país desde que el modelo comenzó a ser producido aquí en 2015. Ligado a la herencia del auténtico Willys, tiene un diseño icónico y único. Es un éxito en ventas desde su lanzamiento y viene consolidándose como símbolo en su segmento y en el liderazgo entre los SUV’s”.
El Renegade comenzó a ser producido en el Complejo Industrial de Goiana (estado de Pernambuco) en abril de 2015, siendo precisamente el primer vehículo en salir de esta fábrica a la que luego se le sumaron la Fiat Toro, el Jeep Compass y ahora el nuevo Commander. En un futuro no muy lejano se incorporará también un SUV de la marca italiana basado en el Fastback Concept. Ya en aquel año de su debut el B-SUV batió récords de ventas, no solo en su categoría sino en el ranking general, llegando al puesto 5 en el país vecino, codeándose con productos como el Chevrolet Onix, Volkswagen Gol o Hyundai HB20.
Con este gran inicio, el Renegade alcanzó las 100.000 unidades producidas dos años después, en 2017. Dos años más tarde, en 2019, llegó el segundo hito, las 200.000 unidades “made in Brasil”, luego de su primera actualización en la que recibió sutiles cambios en su diseño, más tecnología y equipamiento para mantenerse al día con una competencia cada vez más dura, con nuevos jugadores y la renovación de varios de sus rivales.
Actualmente, el más pequeño de la familia Jeep se comercializa en 7 versiones en Brasil –algunas de las cuales son exclusivas para el país vecino-, pero con la mayoría destinada a la exportación a numerosos países de la región. Una de sus últimas novedades fue la incorporación de la versión Moab, que combina el motor turbodiesel Multijet 2.0 de 170 CV con la caja automática de 9 marchas y el sistema de tracción 4×4 con el equipamiento de la Limited, posicionándose como una alternativa más accesible que la Trailhawk tope de gama.
Eso no será todo: la novedad más importante que aguardan con grandes expectativas en la región es la llegada de los nuevos motores 1.0 y 1.3 turbo de la familia Firefly, con potencias de 130 a 170 CV asociados a la nueva transmisión automática CVT cuyo debut está previsto para el año que viene.