Steer by wire: Mercedes-Benz apuesta por la dirección por cable y anticipa su llegada al EQS eléctrico
Luego de décadas con muy pocos cambios, salvo la asistencia eléctrica aunque manteniendo gran parte de los componentes tradicionales, la dirección por cable -o Steer by wire- inspirada en los controles de los aviones, comienza a popularizarse, aunque todavía en productos de nicho: tras su debut en Tesla y el Lexus RZ, ahora es Mercedes-Benz la que sumará esta innovación en la próxima actualización del EQS, uno de los eléctricos más lujosos de su portfolio.
La dirección por cable -o “steer-by-wire”- elimina por completo la conexión mecánica entre el volante y las ruedas delanteras, reemplazándola por un sistema electrónico. Esta innovación permite una conducción más precisa, con menos esfuerzo y mayor comodidad, especialmente en maniobras de estacionamiento o conducción urbana. La firma de Stuttgart promete que bastarán apenas 170° de giro, en lugar de los tradicionales 360°, para alcanzar los topes de dirección.
La novedad fue vista en fase de pruebas sobre un Mercedes EQS camuflado, anticipando su inminente presentación. La unidad se distingue por incorporar un volante de forma peculiar, con diseño similar a un corazón. A diferencia del estilo “Yoke” de Tesla o del volante abierto por arriba introducido por Lexus, esta nueva forma busca optimizar tanto el control como la ergonomía del conductor.
Mercedes-Benz será el primer fabricante alemán en ofrecer esta tecnología en vehículos de producción en serie, a partir de 2026. El sistema estará disponible como equipamiento opcional exclusivamente en combinación con conducción autónoma de nivel 3. Además, el conjunto estará reforzado con el doble de sensores, actuadores y unidades de control, garantizando redundancia y seguridad en caso de fallos.
El EQS también incorporará dirección en el eje trasero, con capacidad de giro de hasta 10°, mejorando la maniobrabilidad general del vehículo. El diseño más plano del nuevo volante no solo mejora la experiencia de conducción, sino que facilita el acceso al puesto de mando y mejora la postura al volante.
Con esta apuesta, la marca alemana busca reforzar su compromiso con la innovación tecnológica y la movilidad eléctrica de alta gama, consolidando su posición en el competitivo segmento premium. Esta tecnología, tal como sucedió en su momento con el MBUX Hyperscreen, no tardará en ser adoptada por otros productos de la compañía en los próximos años.






















