La marca presenta su primer modelo híbrido enchufable, se trata del Golf GTE, que alcanza una potencia total de 204 CV gracias a un motor TSI naftero y un propulsor eléctrico, que le permite consumir solo 1,5 l/100 km y con unas emisiones de 35 g/km de CO2, sin perder nada de deportividad, mientras con la propulsión eléctrica es capaz de recorrer 50 km.
El nuevo Golf GTE representa la convivencia ideal en un mismo modelo de dos conceptos aparentemente dispares en el mundo del automóvil: máximo ahorro y carácter deportivo. Este vehículo híbrido equilibra de forma perfecta el motor TSI naftero y el propulsor eléctrico, a la vez que ofrece unas prestaciones sorprendentes. Con su autonomía máxima de 940 km, es ideal para trayectos largos, pero al mismo tiempo rebosa deportividad en cuanto a aceleración y velocidad.
La propulsión del Golf GTE está compartida por el potente motor turbo naftero e inyección directa 1.4 TSI de 150 CV y el motor eléctrico de 102 CV. El rendimiento máximo de ambos motores combinados es de 204 CV. Ambos propulsores se combinan con la caja de cambios automática DSG de seis velocidades, desarrollada especialmente para la propulsión híbrida y que cuenta con tres acoplamientos: los dos del doble embrague y el de desconexión. Este último desacopla el TSI del eje de propulsión delantero, siempre que sea posible.
Las prestaciones del GTE son propias de un deportivo y acordes con la filosofía GT, ya que usando la máxima potencia del motor TSI -pulsando el botón del «Modo GTE»-, el coche acelera de 0 a 100 km/h en tan solo 7,6 segundos y alcanza una velocidad máxima de 222 km/h. El par máximo resultante de la alianza del motor naftero y del motor eléctrico es de 350 Nm. Cuando el conductor opta únicamente por la propulsión eléctrica, el Golf GTE alcanza una velocidad máxima de 130 km/h.
En su condición de híbrido, este nuevo Golf GTE puede utilizarse en modo puramente eléctrico y satisfacer las necesidades de aquellos usuarios que realizan trayectos urbanos. El funcionamiento «E-Mode» -también activado mediante la pulsación de un botón- propulsa el vehículo con cero emisiones. La batería de iones de litio se carga a través de un enchufe situado detrás del emblema VW de la parrilla. Si se conecta a un enchufe doméstico, alcanza el 100% de su capacidad en 3 horas y 45 minutos; si se opta por el sistema de alimentación «wallbox» en el garaje o en las estaciones de carga públicas, solo son necesarias 2 horas y 15 minutos para que la batería esté cargada completamente.
