Adiós Roma, hola Amalfi: Ferrari presentó su nuevo GT con nombre italiano y espíritu renovado

Tan solo seis años después de su debut, la Ferrari Roma se despide y da paso a su sucesor: la nueva Amalfi. Lejos de tratarse de un modelo completamente inédito, la Amalfi representa una profunda evolución del gran turismo que supo convertirse en la puerta de entrada al universo de Maranello. Ahora, con un nombre distinto, diseño actualizado y mejoras en todos los aspectos, el deportivo italiano se prepara para continuar la conquista de nuevos clientes.
Presentada originalmente en 2019, la Roma combinaba elegancia, deportividad y un potente motor V8 biturbo, apuntando a un público joven que buscaba acceder a la exclusividad Ferrari sin ir directamente a los modelos más extremos. La Amalfi retoma esa fórmula y la refuerza, con una estética más limpia, mayor refinamiento y un impulso extra en sus prestaciones.
Aunque mantiene la silueta clásica del Roma, el nuevo modelo introduce sutiles cambios: el capot cuenta con una sección central más marcada, los faros están unidos por una banda negra y la parrilla da paso a una toma de aire más convencional. En los laterales se destacan nuevas llantas de 20 pulgadas y retrovisores rediseñados, mientras que en la parte trasera las líneas se vuelven más angulosas, con un difusor prominente, ópticas modificadas y un alerón trasero activo de tres posiciones.
Puertas adentro, mantiene la configuración 2+2, aunque con una reinterpretación más sofisticada. Se abandona el concepto de “doble cabina” en favor de una consola central más baja, con detalles en aluminio anodizado fabricado en una sola pieza. Las tres pantallas digitales se mantienen, pero la principal ahora es más grande y de disposición horizontal, similar a la del Ferrari 12Cilindri. También se incorporan botones físicos en el volante, nuevos asientos y un botón de encendido reposicionado en el centro.
Mecánicamente, el motor V8 biturbo de 3.9 litros recibió varias mejoras: entrega 640 CV (20 CV más que la Roma), mantiene los 760 Nm de par, e incorpora un nuevo cigüeñal plano, block rediseñado, controladores optimizados y una nueva ECU. La transmisión automática de doble embrague de 8 marchas también estrena central electrónica. Todo esto se traduce en una aceleración de 0 a 100 km/h en 3,3 segundos y una velocidad máxima de 320 km/h.
Ferrari también recalibró la dirección y los sistemas electrónicos de asistencia e incorporó tecnología de freno ‘brake by wire’ para facilitar la conducción de quienes se inician en el mundo de los deportivos de alto rendimiento. Las mejoras aplicadas al chasis, junto con la suspensión regulable, no solo aumentan la eficacia, sino que también mejoran el confort y la seguridad al volante. El peso total se mantiene bastante bajo, con apenas 1.470 kilos.
Con su lanzamiento previsto para el primer trimestre de 2026, el flamante GT buscará continuar el legado del Roma, pero con una identidad propia, más moderna y tecnológica.