Es un ícono entre los llamados hot hatchs y el que hizo mundialmente famosa la sigla GTI (Gran Turismo Inyeccion), que hasta el día de hoy sigue identificando a las versiones deportivas de muchos vehículos, pero también fue el que acercó prestaciones y deportividad a un público masivo que hasta ese momento estaba lejos de poder permitirse un vehículo más prestacional por cuestiones económicas.
A 41 años de su lanzamiento, hacemos un breve repaso de las características más importantes del Golf GTI MKI, tal vez, el más deseado de todos.
Nació en 1976 casi como un producto de nicho, ya que los directivos de Volkswagen en ese momento sólo pensaban vender 5.000 unidades, pero que debido a la altísima demanda esa cifra fue superada ampliamente, muy ampliamente: 662.000 unidades, lo que ayudó a que el Golf se convirtiera en el auto más vendido del mundo, quebrando los récords del mítico Escarabajo y el pionero Ford T.
Esta primera generación estaba equipada con un motor 1.6, obviamente a inyección como su nombre lo indica, que desarrollaba 110 CV y un torque de 137 Nm. Valores similares a los de un Gol actual, pero que sobresalían para la época y que, gracias a su bajo peso -poco más de 800 kg-, le alcanzaban para acelerar de 0 a 100 en alrededor de 9 segundos y lograr una velocidad máxima de 182 km/h.
Además de los tímidos detalles en rojo bordeando el frente del auto, el emblema GTI y el spoiler delantero en negro que sugerían sutilmente que se trataba de una versión deportiva, otro símbolo de Golf GTI MKI es su tapizado con un entramado escocés o tartán y la palanca de cambios que simula ser una pelota de golf. Fue una idea de la diseñadora Gunhild Liljequist para asociar al auto con el mundo del deporte y aunque al principio a muchos les pareció una extravagancia, al día de hoy se sigue ofreciendo en muchos mercados.
“Con el GTI, Volkswagen democratizó la deportividad, creando un modelo de altas prestaciones al que podía acceder el gran público. Hoy las siglas GTI son sinónimo de deportividad, de éxito y de vanguardia, pero también de emoción y esto es algo que debemos agradecer a los miles de fans que cada día hacen más grande esta leyenda», señaló Pedro Fondevilla, director de Marketing de Volkswagen España, un país donde el hatchback alemán tiene muchísimos seguidores y un importante encuentro anual, el GTI Day.
41 años pasaron entre la primera y la actual séptima generación, de sus “modestos” 110 CV al moderno 2.0 TSI de 220 CV (230 CV en la actualización que llegará antes fin de año), creció en tamaño, equipamiento y prestaciones, pero la esencia sigue manteniéndose y continuará por los próximos cuarenta años y más.