Informe de Financiación Prendaria: Octubre refleja la incertidumbre con una caída en el crédito para autos
Un análisis del mercado de créditos prendarios en Argentina revela un panorama complejo durante octubre, donde la incertidumbre macroeconómica y electoral continúa frenando la recuperación del sector. El informe detalla la evolución reciente de la financiación para vehículos nuevos y usados, identificando a los principales actores y la performance de los instrumentos de crédito.
Panorama general: caída en la participación prendaria
En un contexto de expectativas a la espera de definiciones políticas, el mes de octubre no mostró señales de recuperación en la participación de los créditos prendarios. Con 32.540 prendas inscritas en total, estas operaciones representaron apenas cerca del 15% de las ventas de vehículos nuevos y usados, consolidando una tendencia a la baja.
La data confirma que, tanto para 0km como para usados, la constitución de prendas se contrae a un ritmo más acelerado que la caída en las ventas mismas, lo que evidencia una mayor reticencia tanto para otorgar como para solicitar financiamiento en el escenario actual.
Financiación de 0km: se toca el mínimo anual
El segmento de vehículos nuevos marcó un punto crítico en octubre, ya que la financiación sobre los patentamientos totales cayó a un 43,1%, su nivel más bajo del año. La contracción en este mercado fue doblemente pronunciada: mientras las compras de 0km cayeron un -7,1% frente a septiembre, la cantidad de prendas registradas lo hizo en un -13,1%.
Esta dinámica refleja cómo la incertidumbre condiciona las decisiones de compra de bienes durables. No obstante, el informe destaca que, a pesar de esta moderación del ritmo iniciado a fines de 2024, los niveles de financiación se mantienen en parámetros históricamente elevados, demostrando su rol fundamental como motor de ventas en contextos favorables.
Financiación de Usados: los bancos lideran la retracción
El mercado de vehículos usados repite la tendencia, registrando en octubre su participación mínima anual, que se ubicó en un 6,0% del total de operaciones. La contracción aquí fue aún más marcada: las transferencias cayeron un -3,1%, pero la cantidad de prendas se desplomó un -15,4%.
Al desagregar los acreedores, se observa que los bancos fueron los que más ajustaron su exposición, con una contracción del -20,2% en sus operaciones. Las financieras, por su parte, mostraron una caída mucho más moderada del -2,1%, ganando terreno relativo en un mercado que se achica.
Conclusión: el crédito como variable clave
El acumulado del año sigue dejando en claro una lección para el sector: las herramientas prendarias y el crédito son un componente fundamental para dinamizar el mercado automotor. La actual desaceleración se lee más como una pausa impulsada por el contexto que como un cambio estructural. La expectativa del sector está puesta en que, una vez despejada la incertidumbre, el crédito pueda volver a actuar como el significativo motor de ventas que ya demostró ser.
























