Salón de Detroit: Chevrolet presentó la nueva generación de la Silverado

Desde Detroit – Ya se sabe que Estados Unidos es el mercado más grande y demandante de pick ups, un tipo de vehículo que está tan arraigado a su cultura automovilística tanto o más que los muscle car. Aunque desde hace varias ediciones los autos eléctricos y de tamaño más compacto vienen cobrando protagonismo en el NAIAS, las camionetas nunca pueden faltar. Ford apostó esta vez por el regreso de su pick up mediana, la Ranger, RAM por su renovada 1500  y era obvio que General Motors no se iba a quedar de brazos cruzados, menos luego de celebrar los 100 años de Chevrolet fabricando pick ups y su respuesta fue ni más ni menos que una nueva generación de la Silverado.

Aunque en nuestro país dejó de comercializarse a fines de los 90/principios del 2000, en su país natal siguió evolucionando, siendo la eterna rival de la Serie F de Ford y ahora llegó el turno de una nueva renovación. Estéticamente toma algunos rasgos de su antecesora, pero con líneas más agresivas y aún más intimidante. Cada marca tiene su seña de identidad y en el caso de Chevrolet es desde hace más de 30 años la parrilla y los faros divididos en dos, que adoptan la iluminación de Led y una firma luminosa con forma de V.

Siempre resulta interesante ver cómo las tres automotrices aplican fórmulas distintas para lograr que sus pick ups luzcan imponentes, lujosas, pero también sean más eficientes. Ford comenzó con el uso del motor V6 EcoBoost en lugar de los V8 y la fabricación en aluminio, RAM recurre ahora a un sistema mild-hybrid y Chevrolet tampoco quiere quedarse atrás, equipando a sus V6 y V8 con sistema de desactivación de cilindros según demanda (puede funcionar hasta con uno), más un turbodiesel Duramax de 6 cilindros en línea –la potencia de cada uno de ellos no fue informada-, con transmisiones automáticas de 8 y hasta 10 marchas.

La Silverado se comercializará en 8 versiones distintas, basadas en tres líneas de equipamiento u orientación. Por un lado estarán las más básicas, destinadas principalmente hacia el trabajo –denominadas Work Truck, Custom y Custom Trailboss, con estética específica y mayores capacidades off road-; por otro lado las variantes intermedias, para uso mixto –como las LT, RST y LT Trailboss con mayores capacidades off road-; y por último las tope de gama –LTZ y High Country, con detalles como apertura de caja de carga con control remoto.

Otra gran novedad es la utilización de aluminio para las partes móviles de la camioneta (capot, puertas y tapa de la caja de carga) y de aleación de acero de alta resistencia para las partes fijas (estructura principalmente), con lo que consiguió una importante reducción de peso.

Lamentablemente, sigue siendo un producto destinado al mercado norteamericano, por lo que su llegada a nuestro país está prácticamente descartado, aunque nunca está de más conocer de cerca a estas moles del campo y las autopistas estadounidenses.