Mientras en nuestro país la filial local de Honda decidió concentrarse en los SUV’s y apuntar a una franja de mercado más alta, convirtiéndose así en una marca más de nicho, en Brasil la estrategia es bastante diferente, con un portfolio más amplio y una política de precios distinta, con valores no muy lejanos a los de sus competidores, lo que hizo, por ejemplo, que la histórica rivalidad entre el Civic y el Toyota Corolla se mantenga y ambos luchen por el liderazgo del segmento. Todo esto podría cambiar en los próximos años, dado que la firma nipona se plantea un cambio en su estrategia que apunta a seguir las tendencias globales en electrificación, tecnología y seguridad.
Así lo reveló Atsushi Fujimoto, el nuevo Presidente de Honda South America en una conferencia de prensa en Brasil con periodistas especializados en economía. Aunque el ejecutivo evitó brindar mayores precisiones, anticipó que habrá una reducción en el portfolio de productos –sin mencionar cuáles seran los discontinuados-. Todo parece apuntar a que el Civic dejará de ser producido en el país vecino cuando finalice la vida comercial de la actual décima generación y pasará a ser importado sólo en versiones tope de gama y con el motor 1.5 turbo. Lo mismo sucedería con el Fit, que dio un notable salto tecnológico en su nueva generación.
Sin embargo, no todas son malas noticias: ambos modelos serían reemplazados industrialmente por el nuevo City, que será comercializado tanto en su versión sedán como en la inédita variante hatchback, que se posicionará como un sustituto para el Fit y competirá con el Toyota Yaris, Volkswagen Polo y Chevrolet Onix, entre otros. En ese sentido, el ejecutivo aclaró que tanto la planta de Itirapina como la de Sumaré –que está siendo transformada en un Centro de Desarrollo- seguirán activas, una muy buena señal considerando que la compañía decidió cerrar algunas de sus fábricas en varios países como la de Reino Unido y la de Argentina (que se especializa sólo en la producción de motocicletas). Al City también es muy posible que se sume la nueva generación de la HR-V, que por ahora es denominada internamente como Proyecto NES.
Otro punto clave de este nuevo plan es que la marca buscará mantener en línea a la filial regional con su estrategia global en seguridad y electrificación: desde este mismo año, todos los vehículos que sean comercializados en Brasil contarán con el paquete de asistencias a la conducción Honda Sensing. Asimismo, siguiendo su objetivo de comercializar sólo vehículos eléctricos desde 2040, lanzará variantes híbridas y eléctricas de su portfolio actual en los próximos años: el primero de ellos es el Accord Hybrid –disponible en el país vecino-, al que podría sumarse la CR-V Hybrid o incluso el Insight.
Por el momento, las declaraciones del directivo se enfocaron en el país vecino, por lo que no sabemos si en Argentina se aplicarán los mismos cambios. Presumiblemente sí, considerando que la estrategia fue planteada por la filial sudamericana y no la de un país en particular.