Nissan sigue alcanzando hitos productivos en la región: la planta de Resende, inaugurada en 2014 y en la que se fabrican el March, Versa y el Kicks alcanzó las 50.000 unidades exportadas para América Latina. Justamente, el protagonista de esta marca fue un Kicks UEFA Champions League que fue enviado para nuestro país.
El complejo industrial ubicado en el sur de Río de Janeiro celebró recientemente la marca de 300.000 unidades producidas en total y resulta una pieza clave para la estrategia de consolidación y expansión de la firma japonesa en la región. La producción del March y el Versa comenzó en abril de 2014, en una primera etapa sólo para abastecer al mercado local, pero tres años después inició esta segunda etapa en la que comenzó a exportar parte de lo fabricado. Así, en 2017, el primer país en recibir vehículos producidos en Brasil fue Paraguay. Actualmente, con el B-SUV como producto estrella de Nissan en la región, la planta exporta el 20% de su volumen total a los 38 países donde la compañía tiene presencia, entre los que se destacan Argentina, Bolivia, Chile, Costa Rica, Panamá, Perú, Paraguay y Uruguay. Además, en el año fiscal 2018, registró un notable crecimiento en la producción, superando las 106.000 unidades.
«El marco de 50,000 vehículos exportados confirma que el proyecto se ha acelerado a lo largo de los últimos años. Además, refuerza a la planta de Resende como un potente centro de producción y exportación de Nissan, con modelos fabricados bajo el alto estándar de calidad y tecnología japonesa», señaló al respecto Claudio Souza, gerente senior de Exportación de Nissan Brasil.
La puesta en funcionamiento de esta planta demandó una inversión de más de U$S 1.700 millones y posee un ciclo completo de producción, en el que trabajan 2.200 operarios divididos en dos turnos entre las diversas actividades que se desarrollan: desde el área de estampado, pasando por las de chapa y pintura, inyección de plásticos, la fabricación de motores, montaje e inspección de calidad y pista pruebas.