
Más allá del avance de la electrificación y aunque sus ventas ya no llegan a los niveles de antaño, el Volkswagen Golf sigue siendo uno de los pilares de la marca alemana en Europa y posiblemente su modelo más representativo. Ya con algunos años en el mercado, la octava generación se prepara para recibir su actualización de media vida y tras varios meses de prueba, ahora ya comenzaron a circular unidades con la que sería la configuración definitiva.
Así lo demuestran las fotografías publicadas recientemente por medios de prensa europeos en las que se observa a una unidad casi sin camuflaje y que ahora sí deja ver las modificaciones estéticas que incorporará: tal como se preveía, los cambios se concentran en el sector frontal, con faros un poco más finos que en el modelo actual y equipados con la tecnología Matrix Led IQ.Light. Por debajo, el paragolpes también fue replanteado por completo y ahora cuenta con un diseño inspirado en la gama ID, con una gran toma de aire que se extiende a lo ancho, pero en este caso co una máscara negra. De perfil estrenará nuevas llantas de aleación, mientras que en la parte trasera se modificaría el layout interno de los faros y la parte inferior del paragolpes.
Donde sí habrá cambios de consideración serán en el interior. El Golf VIII dio un importante salto respecto a su antecesores en el diseño del tablero, que dejó de lado la sobriedad habitual por una propuesta más moderna inspirada en el ID.3, con formas más tridimensionales y la renovación de muchos comandos, que pasaron a ser táctiles o estar “disimulados”. En esta actualización, gran parte de la plancha frontal será renovada para alojar a una nueva y enorme pantalla para el sistema multimedia, que sobresale más del conjunto y con características muy parecidas a la que utilizará la Tiguan, también fotografiada en su fase de pruebas hace algunos meses atrás. Esto traerá aparejado cambios en el diseño de las salidas de aire y en el instrumental, con un display más grande. El centro del volante también luce diferente al que actualizan actualmente la mayoría de los productos de la firma de Wolfsburg.
Más allá de esta transformación estética, también incorporará más sistemas de asistencia a la conducción y servicios digitales conectados. Cabe aclarar que al tratarse de un prototipo de pruebas, la unidad contaba con cables, fichas, interruptores y todo tipo de conexiones a la vista, elementos que por supuesto desaparecerán en la versión de producción.
Mecánicamente se espera que haya una actualización de la gama de propulsores nafteros, diésel e híbridos enchufables que se ofrecen hasta ahora, con una mejora en su eficiencia y reducción de emisiones, pero sin cambios muy profundos.
De acuerdo a nuestros colegas, el facelift del Golf será presentado a principios del año que viene, siendo posiblemente la última generación con motor de combustión.
Espero que gane en confiabilidad , en lo que respecta a la caja DSG si la trae